28.12.14

Si te digo que no, es NO



Me odio cuando deseo ser alguien que no soy
cuando me veo en el polo opuesto del que me encuentro.
Me pierdo en los detalles,
me pierdo en la traducción.
Y este espejo en el que me reflejo está roto,
viene mal de fábrica.
Lo que veo es irreal,
y yo me estoy creyendo algo que no es, que no está.
Desde la bipolaridad de mis acontecimientos.

Y me quiero curar pero, ¿y si entonces dejo de sentir?

Tengo miedo a dejar de sentir.

26.12.14

Canción sin sentido específico



Si la muerte osa cruzarse alguna vez por mi camino
haré que no espere más de la cuenta:
me encontrará peinada y vestida para la ocasión.

Si la muerte se oculta detrás de un disfraz
y consigue engañarme, un día cualquiera
me mantendré extática y alerta
y, quizás, musitando una canción.

Cuando eso suceda comprenderé
que el momento más oscuro de la noche
es justo antes del amanecer,
y que encender la luz de las galaxias muertas
carece de sentido.
(Eso lo sabe cualquiera).

Pensando en esto me doy cuenta
de que eterna juventud no existe
y que el avatar que te enseño funciona.
Que mi piel se agrieta día a día
pero la música sigue sonando y el cuerpo nos pide bailar.
El amor se torna algo improbable
y es normal que tú y yo vivamos en planetas diferentes.
Porque nada de esto tiene sentido:
las rosas no huelen a peonías
ni la luna se muestra de día.

El agua fresca sacia tu sed de venganza
estás enfadado, odias a cada ser a tu alrededor
pero eso no suma y tu mente sinestésica no consigue
separar el olor del sabor
todo es igual
hoy,
mañana,
el día de después.

Y tú, querida Muerte, ven a golpear a mi puerta cuando quieras
intentaré no avisar a nadie, para que no quieran presentarse a interrumpirnos
beberemos té y comeremos pastas
y después de una breve charla ejecutarás mi destino
y yo te estaré eternamente agradecida por ser el arma de liberación de mi dolor
y aunque nada es para siempre, creo que lo he dicho ya antes,
entre tú y yo nos entenderemos a la perfección.
Sin miedo, sin apego, sin dolor.
(Suena Dvorak)


25.12.14

Conversaciones con un extraño


Esto es una serie de e-mails entre dos personas provenientes de mundos diferentes que intentan mantener un contacto “normal”, a pesar de no tener posibilidad real de establecer un vínculo físico.
Es una semana de mensajes que me inspiró para escribir posteriormente unos relatos con estos dos personajes como protagonistas, donde intenté imaginar cómo habría sido que se conocieran en persona y “de verdad”.

Ella es una chica de treinta y pocos, que vive en Madrid (España)
Él es un cooperante español, de cuarenta y muchos, destinado en Etiopía.

Esta conversación es ficticia.

31/10/2013
J. escribió:
Este mensaje ha llegado un poco raro. Todas las palabras cortadas o con símbolos extraños. Pero me alcanzó para entender (o preguntarme) lo del 7.

¿Cuál es tu nombre? No lo sé, o no lo recuerdo…
Besos.


--
Zoeislove escribió:

Me llamo Zoe.

01/11/2013
J. escribió:

Zoe.
Yo soy Juan.
Cuatro letras, nada más

--
Zoeislove escribió:

4 letras

02/11/2013
J. escribió:

Hola.
¿Cómo puedo hacer para verte?
Quiero ponerte olor

03/11/2013
Zoeislove escribió:

No sé si es buena idea, Juan
--
J. escribió:

Pues si no lo sabes, habrá que descubrirlo.

04/11/2013
Zoeislove escribió:

Pero es que no quiero que pase eso, ¿te parece muy mal?

--
J. escribió:

No… no sé que es “eso” que no quieres que pase.
En cualquier caso, sea lo que sea y siempre que tú lo quieras, no me parecerá mal.

--
Zoeislove escribió:

Eso de que “me pongas olor”, porque para eso hay que verse y es lo que no quiero que pase.
Gracias por comprenderlo.
Que tengas un buen día J
Zoe

--
J. escribió:

Está bien… sigamos siendo nada, si así lo quieres.
--
Zoeislove escribió:

Eso no es verdad, Juan: tú sigues siendo tú, y yo sigo siendo yo. Distinto es que no tengamos ningún tipo de relación, más alls trabajando?
sos lo mejor que va son las pastas.
0 no me satisface en absoluto...a de este intercambio de palabras.

¿Qué es lo que encuentras extraño de esto? ¿Crees que deberíamos trascender a la tercera dimensión para saber que somos reales? Y si es así, ¿por qué?

Quizás si me dieras una razón de peso, cambiaría de opinión.

Besos,
Zoe

--
J. escribió:

Tiene que haberla. Esa razón de peso, digo. Al menos hay algo que me pesa en algún sitio cuando te leo.
La buscaré, y cuando la encuentre te daré una respuesta.

Adjunto besos. Premeditados, todos.

Juan.

--
Zoeislove escribió:

Me quedo pendiente de esa razón. J

¿Qué tal por Etiopía? ¿Pudiste ver ayer el eclipse de Sol?
Besos,
Z.

05/11/2013
J. escribió:

Vivo en las montañas… hubo el eclipse de todas las tardes: un cerro se puso delante del Sol y lo tapó completamente.

Razones, razones, razones… Como no me esfuerce en buscarla, no la encontraré.
Pero vendrá, y será tan simple y llana que no habrá nada más que decir y todo por hablar.

Besos.
J
--
Zoeislove escribió:

Esforzarse es un sinsentido. Si existe, se dejará ver por si sola.
Besu

--
J. escribió:

¿Te gusta la cerveza?
--
Zoeislove escribió:

En este momento de mi vida no bebo alcohol y la 0.0 no me satisface en absoluto…

06/11/2013
J. escribió:

Vaya.. pensé que si no encontraba razones, podría buscar al menos con qué tomarlas.

Té o café, aunque con esos lo mejor que va son las pastas.
¿Estás trabajando?
--
Zoeislove escribió:

No, acabo de ducharme.
Té con limón, si puede ser ;)
--
J. escribió:

¿Tienes Skype o algo con lo que pueda hablar contigo, sin esperar tus mensajes?

(miel y limón… claro que puede ser).
--
Zoeislove escribió:

Whatsapp?
Skype tengo, pero es mi lugar de encuentro con los míos, algo privado.
Quiero que siga siendo así, como el salón de mi casa.
--
J. escribió:

Seguimos en otra órbita… No tengo whatsapp ni quiero violar la intimidad del salón de tu casa. Salvo con tu permiso; te asombrarías de mi discreción.
--
Zoeislove escribió:

Lo de la órbita es muy real, porque no entiendo aún el por qué de esta prisa repentina…
--
J. escribió:

No es prisa. No la hay, pero no me quiero rendir. No hasta que tú me digas basta, al menos.
--
Zoeislove escribió:

Digamos que como no hay razón de peso, yo no he cambiado de idea. Sigo pensando igual que hace algunos correos.
El Skype no es una opción por varios motivos, entre ellos que no estoy nunca en casa y para chatear hay que conectarse. Casi es más a tiempo real esto, si lo piensas un momento.

No es mala gana, Juan. Solo es falta de ella.

Besu.
--
J. escribió:

No sé qué decir. Se me van acabando las palabras.
Me siento como si echara un pulso al viento, sin esperar ganar, ni perder. Sin encontrar resistencia. Nada.

Creo que me voy a sentar aquí, a esperar.

07/11/2013
Zoeislove escribió:

Eso es lo que tienen los impulsos: que cuando no se satisfacen se van. Tan pronto como han venido.

Agarrarse a ellos no es la mejor opción.
Besos y que te vaya bien
Zoe.




20.12.14

Un día cualquiera



SEC. 1 Int. día
Chica, treintañera, con el corazón roto llega a su casa oliendo a whisky y a lascivia de bar. Acaba de enterarse de algo que sospechaba pero prefería ignorar. Se siente muy miserable y desamparada.

Triste
La página en blanco me angustia
un poco porque se que ya no estás ahí,
un poco porque se que estás en otros brazos
Una ausencia de la que soy consciente hace meses
que hoy hice tangible al dejar de suponer,
al preguntar,
y al plantarme de frente a la temible realidad.

Y hoy te lloro porque te tengo que llorar
Y mis lágrimas exorcizan el dolor
está noche de diciembre
(esta mañana angustiosa)
que me encuentra más fría que el hielo
y más temblorosa y frágil que un castillo de naipes
pronto a caer

***

Ojalá un nuevo amor (que hoy creo imposible)
consiga que tú y tu maldito nombre 
sean historia en mi piel.
Y cicatrices sin marcas
que yo misma me encargaré de borrar
para justificar esas lágrimas que aún sangran mis ojos.

Llora, pequeña vida
llora hoy tu dolor
para que tu renacer sea limpio y claro
Y él, el vago recuerdo de un amor
que suena a acorde desafinado

a nota atonal
a voz sin color.

---

SEC. 2 Int. día 
La misma chica suda la resaca de un amor que no es correspondido y que necesita arrancarse de una vez por todas y poder continuar con su vida.

Exorcismo
Unas cuantas noches de buen sexo no me otorgan derecho alguno
a poseerte de ninguna manera más que de una forma estrictamente carnal.

La memoria de tus dedos húmedos sobre mi piel desnuda
no avalan el dolor que siento hoy
por no tenerte entre mis piernas,
dentro de mi corazón,
sabiendo que jamás has sido mío
mas allá que en esos breves momentos aleatorios de cama.

Yo hoy quiero abrasar tu recuerdo
para que las cenizas se lleven
aquello que nunca sucedió.
Y aunque mis dedos sangren lágrimas
al escribir estas palabras
mi alma permanecerá intacta,
Transitando en la catarsis de
un cuerpo dolorido,
ardiendo
en el deseo de ser capaz
de sanar.
Que necesita vaciar para llenarse
Que necesita recordar para olvidar.



7.12.14

Estrella



A ella le gustaba quitar las etiquetas de los tercios da Mahou.
Lo hacía instintivamente, casi sin pensar.
Yo no le preguntaba porque esa era su manera de actuar. 

Así era ella y así me gustaba.
Cada noche, jueves, viernes, quizás sábado también, 

cualquier día se terciaba para que ese tercio de Mahou 
acabara desnudo y sudoroso entre sus manos de dedos gráciles y finos.

Ella era música inaudible, sonaba en otra frecuencia. 

Quizás en otro planeta alguien la oyera pero en este no. 
Era tan sutil, casi imperceptible. 
Muchas veces me pillaba observándola y ella sonreía 
porque sabía perfectamente que la estaba viendo 
(que no mirando).
La escuchaba respirar, 

escuchaba como la sangre corría por sus venas azul princesa, 
y el vaivén me embelesaba, meciéndome en un delicioso trance.

Nadie jamás me hizo sentir lo que me ella me hizo sentir. 

Era como una nota perfecta y yo como un músico con oído absoluto, 
disfrutando de los matices que arrojaba, que irradiaba, que sostenía. 
Me hacia volar y me bajaba a la tierra a la vez. 
Era la cara B de mi banda sonora perfecta.

Hoy ella ya no existe pero yo la sigo viendo en sueños, 

imagino su rostro en medio de la oscuridad 
y de repente todo empieza a verse más claro.
Su música sigue sonando dentro de mi, 

mientras recuerdo las canciones que oíamos 
y me pierdo en la inmensidad de la quietud.

Estrella, brilla alto que aún te veo.

3.12.14

Ya te olvidé


Triste es cuando cae la noche
y te encuentra recogida a merced 
de su quietud.
Es cuando la música suena dentro
y se convierte en sangre ligera
que líquidamente se cuela
en el recuerdo
de un amor que ya olvidé.

Y es diciembre, y el invierno amenaza
con arrebatarte el calor
de esa caricia siermpre dada, 
nunca recibida,
jamás robada.

Mi cuerpo se siente enfermo
carente de tacto
dentro de una cárcel. 
Una prisión de carne,
un simple disfraz.

Cuando te sueñe esta noche
abrázame friamente
para que el calor de tu recuerdo
(olvidado)
no retorne a mí.
Ni hoy, ni nunca.

Quiero ser libre.
Quiero volar.
Quiero ser yo.

Vete lejos,
escapa,
no vuelvas más aqui.
Ya no quiero que estés cerca
y que enfermes mis noches,
que apagues mi pureza.

Tus señales me confunden,
me llevan por un camino
oscuro y amargo
Apágalas. 
La espera me agotó.

Quiero ser libre.
Quiero volar.
Quiero ser yo.
(Has sido mi muso por última vez).



Suena I'll admit you're gone, by Rory Gallagher